Cuando algo nos produce sufrimiento, dolor, enojo, tristeza, alguna emoción que nos desequilibra, es que algo no estamos soltando… Muchas veces, es la misma necesidad de seguir sosteniendo esa emoción!!
Te invito a pensar en algo: Esa emoción no te define. Esa emoción no te representa. No eres esa emoción. Pero no te animas a soltarla porque no sabes qué hay “del otro lado” de ella…
Piensa en una emoción que te desequilibre hoy….
Piensa en una situación que sientas que te agobia, te molesta, te saca el sueño o te pone mal.
Si te dijera qué tendrías que hacer, seguramente tendrás una lista de cosas para hacer… Pero si te pregunto, por qué no las haces, si sabes que haciéndolas estarías mejor, es porque hay algo que no estás soltando!! Y eso te mantiene atado/a al sufrimiento.
A veces estamos apegados a personas… y no podemos alejarnos… Y sentimos que si las “soltamos”, algo esencial nos falta… Lo vimos en la propuesta de ayer… Ahora, ¿qué pasaría si dejáramos ir a esa persona? ¿Qué nos pasaría?
¿Qué implica soltar en una relación? No es soltar a la persona… es soltar…
⦁ Miedos
⦁ Ansiedades
⦁ Toda expectativa sobre la otra persona
⦁ Las etiquetas
⦁ Toda necesidad
⦁ La idea de que cambie
⦁ EL control
⦁ Los juicios
⦁ El juego de tener razón
⦁ Programas condicionantes
⦁ Máscaras/mi necesidad de ver a la otra persona con mis/sus máscaras
⦁ Necesidad de aprobación
⦁ Culpas/Necesidad de culpar
⦁ Enojos
⦁ Resentimientos
⦁ Dependencia
⦁ Ego
⦁ La idea de que somos algo separado (de que vivimos en dualidad, como ya hemos hablado)
Soltar implica no aferrarnos a algo o a alguien por miedo a perder… Detrás del no soltar hay miedos… siempre!!!
Tomate hoy un tiempo para este ejercicio. Escríbelo en tu cuaderno.
Si te preguntara, qué miedos hay detrás de que no sueltes algo que te hace sufrir, ¿qué dirías?
¿Y si esos miedos no fueran reales?
¿Y si luego de soltar te encontraras con tu Ser?
Cuando soltamos lo que estamos desarmando, básicamente, es nuestro mecanismo de control. Dejamos ir un juego de poder. En el cual a veces controlamos y a veces nos controlan. Como sea, en ambos casos, nunca se trata de nuestra libertad.
En una relación dependiente con algo o alguien no somos libres. El soltar se convierte en un acto de libertad. Una declaración de absoluta responsabilidad, que a veces, genera miedo también. Sin embargo, ser libres, independientes, nos da tanta plenitud, y equilibrio que nos permite reencontrarnos con quienes realmente somos.
Transitar la experiencia de soltar nos brinda una perspectiva nueva de cualquier problema, de cualquier sufrimiento, de cualquier sensación de opresión.
Si tuvieras que soltar algo hoy, ¿qué sería?
Y si no lo soltaras ¿qué pasaría?
¿Cuánto tiempo más vas a esperar para soltar?
Si no puedes hacerlo solo/a y sabes que el estar apegado/a te hace mal, pedí ayuda.
A veces, es más importante sostener el sufrimiento que pedir ayuda. Y no nos damos cuenta que una mirada externa, una mano extendida puede hacer más simple ese camino.
Si te encuentras en uno de esos momentos donde quieres soltar y no sabes como… Si te da miedo saber que va a pasar cuando sueltes y eso te genera ansiedad o ataques de pánico o mucho miedo, te ofrezco mi ayuda. Estaré feliz de poder brindarte mis conocimientos y mi tiempo para soltar. Sé que cuando soltamos nuestra vida cambia. Esa es mi tarea, aquí estoy para apoyarte en este camino de Conectar con nuestro Ser.
Te invito también a compartir este material si sientes que puede ayudar a otra persona y a darle mi número, mi WhatsApp, para que me mande mensaje si necesita atención profesional.
Soltar no es algo que hacemos habitualmente. Lo aprendemos. Y te puedo asegurar, que la vida me enseñó a soltar tantas cosas!!! Y después de pasar por muchos estados, comprendí que es más simple soltar que jugar el juego de control, tanto de las personas, como de las cosas. Ese fue sin dudas, uno de los aprendizajes más grandes que la vida me dio desde muy corta edad!!
¡Un gran abrazo a tu alma!